DÍA 2: MARTES 17 DE SEPTIEMBRE DE 2013.
La primera noche en el campamento verde ha sido una de las más duras 
en nuestro camino de lucha. Atrás quedaron aquellos “cómodos” pabellones
 polideportivos por los que pasamos en la marcha y el frío de diciembre 
en La Corrala. Ahora estamos en medio de la calle, y esta vez no es una 
forma de hablar. Nos toca hacer turnos de vigilancia y muy pocos somos 
capaces de conciliar el sueño debido al tráfico que hasta muy tarde y 
desde bien temprano nos roza prácticamente los oídos. No obstante, 
cuando contemos a los que no estuvieron aquí esta primera noche, seguro 
que lo que mejor recordaremos serán las risas que echamos cuando 
sorprendidos por un error de logística acabamos empapados por los 
aspersores que creíamos haber controlado. En un par de minutos lo 
arreglamos y continúa la vigilia que, aunque larga, pasa rápido con la 
agradable compañía de un compañero y su conversación¡.
El segundo día ha sido muy productivo: hemos llevado
 a la sede del Gobierno una carta a la nueva presidenta pidiéndole una 
reunión con nuestro colectivo y explicando nuestras razones para estar 
aquí. Han sido decenas las personas que se han acercado a nuestras mesas
 informativas y a la recogida de material escolar, la mayoría entienden 
que nuestro problema es también el suyo: la Educación es de todos y 
todas, para todos y todas. La repercusión mediática continúa,
 ya no hace falta llamar a los medios, son ellos lo que traen sus 
cámaras porque está claro que lo que planteamos preocupa a toda la 
sociedad. Después de un breve descanso, siguen llegando los apoyos, en 
este caso desde el mundo de la cultura, El niño de Elche,
 quien ya nos acompañó en una jornada en Las Aguas, nos manifiesta su 
solidaridad con una emotiva actuación que a todos nos relaja y da 
fuerza.
A continuación, los amigos que siempre han estado con nosotros y 
tanto nos han asesorado en nuestra lucha, vuelven a acompañarnos en los 
momentos más duros :CGT, SAT, USTEA, y el MAE, en una interesante y 
productiva mesa redonda. Hoy nos vamos a la cama con unos versos en 
mente “ojalá algún día alcancemos la rebeldía del viento…”
¡Buenas noches y hasta la Victoria siempre!
